lunes, julio 02, 2007

La Ginebra y Yo

La primera vez que tome Ginebra casi fue la última.
Eran los 90´s y yo cursaba 1ero de secundaria; recuerdo vagamente aquel día, miércoles ó jueves, de alguna manera llego a mis manos una botella de Ginebra, era tosca y con una etiqueta azul. Aquel oso se burlaba silenciosamente de mí mientras leía en la etiqueta, "Oso Negro".

Recuerdo que nos turnamos para probarlo pero no tuvo mucho éxito debido al sabor fuerte y ácido que acompaña a cada trago. Pero yo, siempre entusiasta en la búsqueda de nuevos sabores decidí mezclar la Ginebra con el producto añejado que sucede a la fermentación de la cascara de la piña y el piloncillo, osease "Tepache". Siempre me ha gustado esa bebida y la frescura y sabor ácido con tintes de dulce me transporta a mi infancia.
La medida fue sencilla, Tepache y un buen chorro de Ginebra, cerrar la bolsa y succionar por el popote color azul.
Triste resultado para un graduado de una de las treinta mejores escuelas primarias de la capital.

Lo que sigue puede ser leído en un libro sobre prisioneros de guerra. Escenas
llenas de color y Delirium Tremens. Mi dulce novia Vanessa como puede me lleva a casa y ahí quedo, entre espasmos y agonía. Logro amanecer al día siguiente y prometo no volver a libar aquel caldo pero aún así el aroma del Tepache y el de la Ginebra se quedaron grabados en mi mente causando nauseas y privandome de su infinito sabor.
Tuvieron que pasar diez años para que me armara de valor y tomara nuevamente aquel brebaje perfumado. Fue en sorbos rosados y aroma a canela, entre palabras lascivas y miradas de fuego, fue entre bailes sensuales, lo salado del sudor y los dulces besos de aquella mujer extranjera que gustozo probaba el néctar de las Medias de Seda en una cálida noche de playa.

A aquella diosa sin nombre ya no la recuerdo, ni al sexo que tuvimos pero recuerdo bien la Ginebra con su perfumado aroma y su ácido sabor. Ahora la bebo con singular alegría y miles de sensaciones se encienden en mí.
¿Y tu has bebido Ginebra?

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Estimado usuario del aire contaminado de esta ciudad: Después de varios intentos, algunos de ellos inconscientes, de agregar a mi apartado de bebidas el Gin, Ginebra, Wizard Vodka o como quiera que se le llame a ésta infusión de granos de cebada, maiz, púas y alambres retorcidos.

Me confieso incapaz de beber tal. Si apenas considero aceptable beber Vodka.

La sensación a los primeros tragos es la de estar bebiendo un perfume hecho con el sudor de mineros de Pachuca; después de algunos vasos, la lengua se acostumbra y provoca que el sabor cambie a algo entre PVC quemándose y harina para hot cakes. Ya al final, con el mareo, el sudor, y otros liquidos escurriendo por el cuerpo, la neta ya podria tomar thiner, asi que ya me da igual. Pero el proceso es difícil.

Ahora que si la peda fue gacha, el levantarse es peor. La cruda de este alcohol es brutal, como esta sintetizado, es el equivalente a haberte bebido una botella de polímetros para construccion, provoca calambres, afecta el habla, la coordinación banqueta-llanta, y estimula la producción de olores corporales.

Llegue a la conclusión que ésta bebida está hecha para poder disfrutar de un buen Maniatan. UN (de uno).

Si ya no queda de otra, lo recomiendo en un vaso High-ball, con 3 hielos, a partes iguales con jugo de piña (que no sea jumex, entre mas artificial mejor), el jugo de medio limón, y una pizca de sal, se puede rebajar con un poco de agua mineral para bajarle el sabor a ginebra… o a sal… o a piña (si sabe mucho a agua, echale mas Gin).

Te ves.

Ricky Ran dijo...

Excelente ese es el tipo de comentarios necesarios a este post en particular. La verdad es que si es una bebida dificil pero una vez que se le agarra el gusto se puede beber como dice la canción:

¡¡beben y beben los Vélez en el rio, beben y beben por ver a Dios nacido!!

A mi tambien para variar de los cocktails y del Gin & Tonic me gusta con jugo de piña. Way to go baby!!!

Nube Gorda dijo...

Yo también tengo no muy buenos recuerdos de la Ginebra y prefiero borrarla de mi lista de bebidas favoritas, aún siento la revoltura de panza nomás de pensarlo...¡¡

De todas formas, salud....¡¡¡

bsucho

YiNef dijo...

Ginebra... aun lo recuerdo como un ingrediente de aquel trago magico que conocemos como Kamikaze: ron, vodka, tequila, ginebra y curasao azul...
Una de las sensaciones mas extrañas en cualquier peda... ese perfume tan atrayente que brinda la revoltura de todos esos exquisitos licores...
No pude evitar recordar esto la ultima vez que tome Gin... ver el trago perfumado y semiacido revolverse con quina y sal...
Ahhhh.....*sigh*...

Jorge Hill dijo...

Buenos recuerdos me trae ese elefante rosa con fondo azul, una de las mejores cervezas que he probado en mi vida, ahh... desgraciadamente la gastritis ya no me deja saborear otros alcoholes sin terribles consecuencias, tal vez una deliciosa Bombay Saphire de vez en cuando...