Esta entrada contiene dos historias o narraciones distintas pero con el mismo tema. Gracias.
Por cierto, agradezco a La Marota por haberme dado este segundo premio. No conozco mucho las reglas de Blogger y de estas cosas llamadas Memes lo que si se es que yo vivo en el exceso y pondré y recibiré tantos premios como se me antoje. Las celebraciones al premio blog Solidario continuaron hasta el domingo y debido a esto tengo un fuerte dolor en el hígado, se encuentra hinchado y con cualquier movimiento una punzada me recuerda el camino que yo decidí escoger.
Gracias Yori, por tu amable texto justificando el premio, te agradezco las múltiples ocasiones en que me has hecho meditar y razonar un poco más. Life to the Fullest.
Primero
¿En que clase de ser animal se ha convertido uno cuando al ir vagando en la madrugada por la calle, tomando como pits todos los estanquillos cerveceros posibles y deseando dormir, se le hace perfectamente normal e incluso considera emular a un vagabundo que esta durmiendo apaciblemente bajo el fulgor del anuncio luminoso de OXXO?. Espero me lo digan porque ya no se en que me he convertido.
El Whisky y Yo
Es domingo y el dolor abdominal que sufro no me ha impedido servirme un vaso más de whisky; han sido diez días de ingesta alcohólica fuerte, muy fuerte y el whisky ha sido la bebida que más he consumido, supongo que por que es lo que estaba a la mano.
Veo el vaso y mientras me pierdo en el color ámbar del contenido recuerdo que curiosamente el whisky casi siempre lo tomo solo, sin hielos, sin mayor pretensión, sin mayor problema. Y digo curioso porque también lo tomo solo, sin compañía, meditando.
El whisky para mi se ha convertido en la bebida que me da la oportunidad de ahogar mis problemas en ella, sin música, sin gente alrededor. Tal vez sea porque es una bebida un tanto más madura, que por su gusto fuerte y penetrante obliga a tomar las cosas con más calma.
Este que estoy tomando es el afamado McHarrison, whisky escoces que no debe de ser tan malo considerando que alguien se ha tomado la molestia de importarlo, me gusta su color y tiene un aroma fuerte de ese que me gusta desprender.
Yo prefiero los Single Malt, que su gusto es mucho más marcado y penetrante e incluso son mucho más fuertes en su graduación, Glenfiddich es el ejemplo perfecto de un buen Single Malt, el problema de estos es que a los precios que se importan pues es realmente especial el tomar uno.
De Canadá solamente he tomado el Canadian Mist, fue en uno de esos cursos que nos daban para saber como venderlos y de los americanos solamente Jim Beam y el legendario Jack Daniels. El Jacko (Jack + Coca) lo aprendí a tomar con Daniel, un rubio parco de Essex, Inglaterra, que trabajaba en el No Que No y que lo conocí justamente un domingo, después de haber cerrado el restaurante y que caminaba sin rumbo.
Charlábamos largo, él desde dentro de la barra, platicando de amor y de viajes, bebiendo Whisky, Whiskey, Bourbon y Single Malt. En ocasiones cuando no pensábamos emborracharnos bebíamos café Irlandés, era justo en esos días que me narraba el proceso de destilación así como las diferencias entre todos.
No recuerdo la primera vez que tome whisky al igual que ya no recuerdo muchas cosas más pero si recuerdo que cuando tenía 18 y tenía mi primera tarjeta de crédito me daba el lujo de beber whisky. Etiqueta Roja, rocas.
Respecto a añejamientos, la verdad es que no hago mucho caso, lo que si se es que en caso de tomarse acompañado, asegurarse que su añejamiento sea mayor a 18 años, por aquello de la legalidad.